Se trata de enigmas sencillos dirigidos al público infantil en que hay que adivinar frutas, animales, objetos cotidianos, etc. Al orientarse a los niños, tienen un componente educacional al representar una forma divertida de aprender palabras y tradiciones.
Las adivinanzas se plantean en diferentes formatos de metro y composición, si bien son muy comunes los versos octosílabos, las estrofas de dos o cuatro versos y las rimas asonantes o consonantes en todos los versos o, más comúnmente, en versos alternos.
Blanco fue mi nacimiento,
negra mi mocedad,
se me peló la cabeza
y no sé por que será
El condor
negra mi mocedad,
se me peló la cabeza
y no sé por que será
El condor
Un convento bien cerrado,
sin campanas y sin torres
y muchas monjitas dentro
preparan dulces de flores
La colmena
sin campanas y sin torres
y muchas monjitas dentro
preparan dulces de flores
La colmena
Cuando canta, tanto espanta,
que sobresalta a la gente,
con el grito en la garganta,
y las alas en la frente.
El burro
que sobresalta a la gente,
con el grito en la garganta,
y las alas en la frente.
El burro
Hay una señora con
un solo diente, que hace correr en mi pueblo a todita la
gente
Hay una señora con un solo
diente, que hace correr en mi pueblo a todita la gente
Hay una señora con un solo
diente, que hace correr en mi pueblo a todita la genteHay una señora con un solo
diente, que hace correr en mi pueblo a todita la gente
Hay una señora con
un solo die
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